Pasado, presente y porvenir
El porvenir le ha preocupado al ser humano desde tiempos inveterados. Augures, vates, profetas, pitonisas, sibilas, nigromantes y videntes han ocupado —y en algunos lugares del mundo aún ocupan— el lugar privilegiado de quien pronostica —y, por tanto, determina— el futuro de quienes esperan algo que el presente les niega o, cuando menos, no les asegura. El poder de la palabra es grande. Incluso la dicha en su origen era un vaticinio —las palabras dichas, ‘dicta’— que determinaba la suerte de la criatura al nacer. Quizás hoy la estadística haya sustituido al adivino… El presente es cosa actual, aunque algunos ancestros ya nos avisaran de que es lo único que verdaderamente podemos vivir a pesar de su brevedad. El presente se construye en el instante, es un gerundio al que prestamos poca atención. Y el pasado es eso que damos por cierto aunque, a veces intentemos reconstruirlo a nuestra imagen y semejanza. Pasado, presente y porvenir. Todos vivimos en el presente, recordando el pasado y esperando el futuro. Algunas filosofías orientales nos dicen que no, que no hay que vivir en el pasado ni esperar a que llegue el futuro, sino que lo único que vivimos es el presente en cada instante.
A cada instante, en cada instante
a mí me escribo y me reescribo,
aunque el viento o el agua borren
la huella que dejo en la Tierra
y los sentimientos que siento.
A cada instante el viento, el agua,
la huella y la Tierra recuerdan
que puedo reescribirme a tiempo
antes de que el porvenir llegue
y los sentimientos se olviden.
Y todo eso a cada instante
y nada más que en cada instante.
Las consideraciones precedentes surgen del título de un libro hoy casi inencontrable: Pasado, presente y porvenir de grandes nombres. Lo escribió el filósofo Juan David García Bacca allá por los años 80 del siglo pasado. Fue García Bacca quien en sus Confesiones, publicadas póstumamente, dijo que Jorge Santayana —sobre quien escribimos hace apenas una semana en
estas páginas—- era “el mayor filósofo español” del siglo XX y que lo era, “además de gran literato”. Que Santayana hubiera escrito todo en inglés no suponía ningún obstáculo, porque también los grandes teólogos y filósofos del Siglo de Oro español escribieron todo en latín y no por ello se dejó de considerarlos españoles.
¿Cuál es el presente de Pasado, presente y porvenir de grandes nombres? Ya lo hemos escrito: casi inencontrable. ¿Su porvenir? ¡Quién sabe! Quizás tú, lector, hagas por encontrarlo ahora, en este instante, y descubras cuáles son esos grandes nombres.
A uno le gusta cambiar el presente de algunos libros para que su
porvenir sea un poco más halagüeño; hacer de vate o de sibila para que el libro tenga la fortuna de ser
leído. Me ocurre esto con un libro que acaba de publicar la editorial
Siruela. Μe cayó del cielo, un regalo. Se titula El gabinete mágico y lo ha escrito uno de los grandes
editores de España, un hombre sabio, afable, humilde: Emilio Pascual. Es un libro de
bibliotecas imaginarias, para leerlo en pequeñas dosis, “nunca de corrido”, me dice Emilio en una breve nota, “y ni siquiera completo: de lo contrario, empacharía. Y a un amigo no se le debe someter a ninguna indigestión”.
No, su libro no empacha. A ti, lector, desde el lugar privilegiado del
augur bibliofílico, te recito este ensalmo: “Que cada biblioteca que imagines sea un
universo que transites; cada libro que leas, un instante; cada instante, tu
presente, el gerundio al que prestes tu atención”.
Michael Thallium
Pasado, presente y porvenir
Cómo citar este artículo: THALLIUM, MICHAEL. (2023). Pasado, presente y porvenir. Numinis Revista de Filosofía, Época I, Año 2, (CV5). ISSN ed. electrónica: 2952-4105. https://www.numinisrevista.com/2023/03/Pasado-presente-y-porvenir.html
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